A mí me hubiese encantado venir a decir (como toda la gente que me la recomendó) que esta película me partió la cabeza y que es buenísima y bla bla bla... Bueno, ojo. No es mala. Pinta bien, pero lo resolvieron con una serie de clichés bastante predecibles para mí gusto. La idea es buena, pero ya vimos cosas similares en otros thrillers psicológicos. Así que vengo a decir simplemente que la actuación de Christian Bale como Trevor Reznik -un operario que sufre de insomnio hace más de un año y a raíz de esto comienza a "alucinar" (o no) una serie de cosas- es tre-men-da, y que verlo actuar así en esta película ya la hace valer la pena. 30 kilos perdió el chabón para hacer ese papel. Y los tuvo que recuperar en sólo 6 semanas para poder arrancar a tiempo con el rodaje de "Batman begins".