Qué decirlo... A mí no me gusta mucho el estilo de Woody Allen. O sea: lo aprecio, pero no soy fanática ni mucho menos. Esta película tiene un poco de todo. No tiene esa cosa tan rebuscada. Por momentos te olvidás que estás viendo un film del anteojudo. Y de pronto se manda algún clásico... y es obvio. Pero está bien!
"Melinda & Melinda" se trata básicamente acerca de cómo uno puede enfocar una historia con elementos en común y adaptarla hacia la tragedia o hacia la comedia. Y, en un concepto más amplio: de cómo la vida misma puede tomarse de esa forma, y ante una situación podemos reirnos o compadecernos. El elemento fundamental y común que tienen ambas historias es su protagonista: Melinda (interpretada por Radha Mitchell, quien demuestra que puede pasear airosa por ambos estilos). A partir de allí, cada una de las Melindas padecerá distintas situaciones y se codeará con diferentes personajes. Pero Woody igual nos va a hacer entretener un rato jugando con algunos otros elementos en común en ambas historias. Un personaje que se zarpa en bueno es Hobie, en la piel de Will Ferrell. No sólo porque el tipo realmente sabe lo que es hacer comedia, sino porque se nota que Allen volcó en él sus mejores guiños y las mejores líneas de todo el guión. Después podremos encontrar algo que quizás hacía algunas películas de Woody Allen que no hallábamos: Mientras en sus últimos films, él venía poniendo la mirada Allen en el espectador, esta vez vamos a encontrar sus tics desperdigados por todos los personajes. Es decir: todos tienen algo de Woody. Y eso también divierte. En definitiva: "Melinda & Melinda" me dejó contenta y salí del cine sonriente. Quizás porque a mí me resultó más una comedia que otra cosa. Pero claro... ya está planteado desde el vamos que cómo cada uno se tome la película va a depender de si para nosotros la vida es comedia o tragedia.